La Guardia Civil ha identificado a otros 4 menores. Se les acusa de presuntos delitos de lesiones y contra la intimidad y la imagen de menores de edad
REDACCIÓN. Murcia
La operacion, denominada 'ABASHA', se inició cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de supuestas reuniones a la salida de varios centros escolares, acordadas por los menores, para pelearse. La alarma social cundió entre educadores y las asociaciones de padres, que dieron cuenta a las fuerzas del orden. Esta actuación permitió detectar que, en el espacio de una semana, se habían registrado hasta cuatro encuentros violentos entre menores.
Todos proceden de distintos centros educativos de Jumilla y acordaban los puntos de encuentro previamente. Normalmente, escogían lugares poco transitados del casco urbano con la finalidad de retarse y agredirse, tanto en horario escolar -durante el recreo - como a la salida del colegio, ya que los participantes aparecían en los vídeos con sus mochilas de clase. Según los testimonios anónimos recogidos por Onda Regional, los contactos se iniciaban en el patio del instituto, y de allí los estudiantes se dirigían a la calle Portillo de la Glorieta o a otros lugares cercanos.
La operación 'ABASHA' continúa abierta ante la posible implicación de otros menores en los hechos delictivos investigados. Los menores permanecen bajo la custodia de sus tutores legales y las diligencias instruidas han pasado a disposición de la Fiscalía de Menores de Murcia.
La Guardia Civil recuerda que la captación y la difusión de contenidos e imágenes en los que se muestren menores de edad pueden llegar a ser constitutivas de delito e insiste en la protección de los derechos de los menores, así como de su intimidad.
