Comisiones Obreras mantiene el respaldo a la huelga, mientras que desde UGT no se sumarán aunque piden a la Consejería que los docentes trabajen desde casa en los municipios más afectados
REDACCIÓN. Murcia.
Comisiones Obreras sigue adelante con su idea de fomentar una huelga para profesores, personal no docente de centros educativos, alumnos y familias, que deben mostrar su preocupación y también su indignación por las medidas llevadas a cabo por la Consejería de Educación en este curso. Su portavoz, Nacho Tornel, aboga, como fórmula novedosa y posible alternativa para dar solución a las ratios, que los centros abran en turno de mañana y tarde. Frente a esta medida Tornel sostiene que los docentes tendrán que fastidiarse si deben trabajar un viernes por la tarde pero que acabarían haciéndolo por conciencia. Desde CCOO consideran que 1.500 son insuficientes y afirma que incluso la consejera Esperanza Moreno afirmó que esta solución no alcanza para solventar el problema de las ratios.
Por su parte, UGT no se sumará a la huelga convocada para el día 23 aunque sí llevarán a cabo otras reivindicaciones, acordes a la situación de pandemia, como manifestaciones virtuales o mensajes en redes sociales. Desde el sindicato piden a la Consejería de Educación que los docentes puedan trabajar desde casa en aquellos municipios donde el curso comenzará de manera telemática, de manera que se anteponga la salud del personal educativo ante la elevada incidencia de coronavirus registrada en los municipios de Lorca, Jumilla, Totana, Lorquí y la pedanía de Archivel. Desde la Federación de Empleados Públicos de UGT aseguran que los centros no están todo lo preparados que deberían para afrontar un inicio de curso telemático ya que aún no han recibido el material necesario. Tampoco lo están desde casa, según explica la responsable de Enseñanza Pública de UGT, Toñi del Vas.
En relación a esta petición, STERM Intersindical afirma que la Consejería de Educación apuesta por imponer unos criterios que ponen en riesgo la salud del profesorado y del personal no docente que acude a los centros educativos en zonas donde se ha producido un confinamiento debido a las altas tasas de contagio.
Docentes Unidos critica que los 1.500 profesores "no han sido contratados" por la Consejería de Educación "para desdoblar grupos o bajar ratios", sino que desempeñan funciones "de tipo organizativo".
