Los consejeros delegados del nuevo banco resultante de la fusión entre CaixaBank y Caixa, han subrayado que la entidad resultante liderará la banca doméstica en España, con la red comercial más diversificada del país.
REBECA ESCRIBANO. Murcia
La integración entre Caixabank y Bankia "es la mejor fusión que se podía hacer", según el futuro consejero delegado de la nueva CaixaBank, Gonzalo Gortázar. La previsión es conseguir 290 millones de euros al año de mayores ingresos. Sin embargo, la gran duda sigue siendo qué sucede con los empleados y qué parte del dinero público invertido en Bankia se devolverá al Estado.
Hoy se ha presentado el acuerdo de fusión entre ambas entidades, ratificado anoche por los consejos de administración de los dos bancos. La medida se justifica por la situación del sector económico europeo, donde en los últimos cuatro años los tipos de interés han sido negativos y se han vivido unos años de baja rentabilidad. A esto habría que añadir las consecuencias de la crisis del coronavirus.
Con este acuerdo, llegarían a unos 20 millones de clientes y la previsión es generar una alta rentabilidad. Gonzalo Gortazar, consejero delegado de CaixaBank, ha valorado la rentabilidad en la generacion de unos 290 millones de euros al año. Otra de las fortalezas de la fusión es la alta liquidez y baja morosidad. La previsión es que esos beneficios también influyan en los accionistas de las dos entidades. En 2022, los de Caixabank tendrian un incremento del 28 por ciento por acción y los de Bankia, del 69, según ha explicado el presidente de Bankia y futuro consejero delegado de la nueva CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri.
Los dos primeros años se centrarán en el proceso de integración. La nueva entidad, que mantendrá la marca CaixaBank, una cuota en créditos del 25 % y del 24 % en depósitos y una presencia geográfica diversificada. Todavía se desconoce qué sucederá con los empleados. Gonzalo Gortazar ha asegurado que negociarán más adelante la forma de solventar las duplicidades.
Otra duda es qué sucede con el dinero público que se invirtió en Bankia. José Ignacio Goirigolzarri cree que independientemente de la cantidad que se devuelva, la decisión fue correcta en ese momento porque se estabilizó el sistema financiero.
El Estado tendrá el 16 % del nuevo CaixaBank, valorado en unos 2.700 millones, según el precio al que se están cotizando las acciones de ambas entidades. El FROB, la autoridad encargada de gestionar los procesos de resolución de las entidades de crédito, formará parte de un consejo integrado por 15 miembros, un tercio son de bankia y dos tercios de Caixa.
