Nos lo ha contado Jacques Sibide, un marfileño que llegó a España en cayuco, vive en Murcia con su mujer y cuatro hijos, y sobrevivió a una travesía por el continente africano llena de penalidades
PAULINO ROS / Murcia
Hasta 8.000 euros están pagando los emigrantes africanos por un sitio en una patera con destino Murcia. Nos lo ha contado alguien que conoce bien la situación, porque llegó a la Región de Murcia después de cruzar el continente africano, sobrevivir a condiciones inhumanas en Marruecos, viajar en cayuco a las Canarias, y ser trasladado desde allí a la comunidad murciana.
Se llama Jacques Sibide, es natural de Costa de Marfil, y vive en Murcia con su esposa y cuatro hijos, los tres últimos nacidos aquí. Dice Jacques que las mafias están perfectamente organizadas, y sugiere que necesariamente deben tener como colaboradores a funcionarios de los diferentes países que atraviesan los migrantes. Jacques pagó 2.500 euros por subirse a un cayuco en 2004, hoy la cifra se ha triplicado.
Quienes llegan a territorio español han tenido que pasar todo tipo de calamidades. Muchos no lo cuentan, nos dice Jacques, que estuvo seis meses encerrado en Marruecos en una casa de dos habitaciones compartida por ochenta personas, y con un solo aseo.
Jacques Sidibe critica duramente al partido VOX y a los políticos que van contra la inmigración. Les recuerda que gracias a los inmigrantes hay muchos españoles que tienen trabajo, comenzando por los maestros.
Aunque Jacques está integrado en Murcia, sus tres hijos nacidos aquí, Jesús, Ricardo y Marie, llevan años esperando la nacionalidad.
