Los aditivos que liberan los microplásticos pueden terminar en las especies marinas que luego nos comemos. El estudio forma parte de uno más amplio en varios puntos de la costa española
REDACCIÓN. Murcia
Investigadores del Oceanográfico de Murcia están analizando los microplásticos que puede haber en el mujol, el berberecho, y la caracola del Mar Menor. El estudio forma parte de uno más amplio coordinado por el CSIC en varios puntos de la costa española.
En 2014 se descubrieron restos de fármacos y otros productos químicos en los sedimentos del fondo marino del Mar Menor. Ahora se trata de analizar la fauna marina, como explica el investigador del Instituto Español de Oceanografía con sede en San Pedro, Víctor León.
Se acaba de publicar en una revista internacional el resultado de otra investigación en la que ha participado el científico murciano. Los datos obtenidos son preocupantes. Se han encontrado casi 300 microplásticos por kilo de sedimento a 10 millas de la costa mediterránea. Se tomaron muestras en 10 puntos desde Barcelona a Algeciras, uno de ellos en la costa de Cartagena.
Víctor León dice que el riesgo está en los aditivos que liberan los microplásticos ya que pueden terminar en los organismos de las especies marinas que luego nos comemos.
