El presidente de la asociación Nueva Esperanza, Manuel Hernández, que atiende a personas con ludopatías, asegura que se ha disparado el número de afectados y que son cada vez más jóvenes
M.A. Cartagena
La asociación murciana Nueva Esperanza, miembro de la Federación Española de Jugadores de Azar en Rehabilitación, alerta sobre el aumento en casi un 50 por ciento del número de afectados. El perfil más novedoso es el de un joven de entre 18 y 25 años adicto a las apuestas deportivas. En los últimos años ha bajado la edad de inicio en la Región de Murcia y ha subido de forma importante el número de jóvenes con problemas, al tiempo que se abrían las puertas de nuevos locales. Son más de trescientos salones de juego en la actualidad que convierten a Murcia en la primera del país en contar con este tipo de locales y, según Manuel Hernández, en la primera de Europa. Esta organización sin ánimo de lucro denuncia la permisividad legal y la falta de control por parte de las Administraciones.