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Murcia es una mala región para hacerse viejo

Así de rotundo se muestra el profesor Marcos Bote, coordinador del informe sobre la situación de los mayores en la región que hoy ha publicado el Consejo Económico y Social.

14 ENE 2021 - 22:00
Murcia es una mala región para hacerse viejo
El informe del CES pide multiplicar el gasto en sanidad y servicios sociales durante la próxima década
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Murcia es una mala región para hacerse viejo
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PACO MARTÍNEZ.

Murcia no es una buena región para envejecer. Es la rotunda conclusión a la que llega el profesor Marcos Bote, coordinador del informe publicado hoy por el Consejo Económico y Social sobre la situación de los mayores en esta comunidad autónoma. El documento revela que los murcianos vivimos menos tiempo y lo hacemos en peores condiciones de salud que la media nacional. Para contrarrestarlo, los expertos proponen un paquete de medidas, que incluyen deducciones fiscales y ayudas directas a los jubilados con pensiones más bajas pero que, sobre todo, pasa por multiplicar el gasto en sanidad y servicios sociales y por reorientar todo el modelo de atención a la dependencia.

Los datos son tozudos: los pensionistas murcianos son los terceros por la cola en nivel de ingresos de todo el país. Su renta y su pasado laboral guardan relación directa con la esperanza de vida, que es la quinta más baja de España, y con el estado de salud de los últimos años de vida, que es también peor que la media nacional. La conclusión del coordinador de este informe, el profesor de sociología Marcos Bote, no admite paliativos: Murcia no es una buena región para hacerse viejo.

Para tratar de corregir la situación, el panel de expertos que ha participado en la elaboración de este estudio plantea un decálogo de medidas. Piden, por ejemplo, que la Comunidad Autónoma establezca una política de deducciones fiscales y de ayudas directas dirigidas a los jubilados con pensiones por debajo de los mil euros, que son la mayoría en esta región. Lo demás pasa por aumentar la inversión: a lo largo de los diez próximos años habría que ir incrementando esas partidas hasta destinar 658 millones de euros más a sanidad y multiplicar por cinco el presupuesto de servicios sociales. Es mucho dinero, pero Bote asegura que con la política fiscal apropiada la comunidad puede permitirse ese aumento del gasto social.

El cálculo de necesidades es claro: dicen estos expertos que la región necesita aumentar la red de atención primaria para pasar de los 85 centros de salud actuales a 130, y de los 180 consultorios locales que hay ahora mismo a cerca de 600. También creen necesario aumentar las plazas en centros de día y residencias, y calculan que los centros de mayores, que ahora son 68, deberían llegar a ser 205.

LOS MAYORES DURANTE LA PANDEMIA

El informe, elaborado antes del inicio de la pandemia, ya detecto que las residencias de mayores necesitaban tener un mayor seguimiento de su actividad por parte de las administraciones y más inspecciones. Llegaron a esa conclusión después de entrevistarse con usuarios, trabajadores e incluso gestores de las residencias de mayores. Todos entendían que estos establecimientos tenían un grave déficit de atención pública y de formación de su personal.

Pero el documento incluye además un apéndice sobre los efectos de la pandemia entre los mayores de la región. Dice Marcos Bote que, evidentemente, lo peor han sido las víctimas mortales, aunque advierte de que el coronavirus ha dejado otras dos víctimas por el camino: los servicios sociales, que se han visto absolutamente desbordados; y la atención primaria, cuya saturación ha impedido mantener la atención sobre las patologías crónicas que sufren gran parte de los murcianos mayores de 65 años.

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