El proyecto para transformar la refinería contará con la construcción de la primera planta de biocombustibles de España y estiman crear unos 700 empleos durante dos años
EVA CABALLERO. Cartagena
Repsol desmantelará dos antiguas parcelas de la refinería de Cartagena para ubicar la nueva planta de biocarburantes. Cada vez es más dificil encontrar personal cualificado para realizar estas obras, según su director Antonio Mestre.
La compañía trabaja habitualmente con contratistas que se quejan de la falta de jóvenes formados para trabajar en el sector. Ha ocurrido con otras paradas de la factoría y últimamente el problema es mayor. El director de la refineria, que ha comparecido hoy en la Comisión de Reactivación de la Asamblea, ha tendido la mano a los diputados para contribuir a mejorar la formación dual, de forma que la región cuente con personal cualificado.
La nueva planta de biocarburantes de Cartagena que funcionará en 2023 conllevará un largo proceso de construcción. Primero hay que desmontar dos estructuras en desuso. La empresa ya está gestionando las licencias.
Maestre ha asegurado que Repsol pretende invertir "entre 300 y 900 millones de euros en la Región en los próximos 5 años si se dan las condiciones adecuadas" y ha insistido sobre la importancia de apoyar al sector industrial para salir de la crisis. En ese sentido, ha advertido a los parlamentarios que la inversión que va a hacer Repsol para transformar la refinería de la ciudad portuaria y descarbonizarla en los próximos años "revierte el doble" en la sociedad.
Durante su intervención ha hecho referencia al proyecto para transformar la refinería que contará con la construcción de la primera planta de biocombustibles de España, en la que invertirán unos 188 millones de euros y estiman crear unos 700 empleos durante dos años.
