La Asociación de interinos AIDMUR califica como una auténtica escabechina las oposiciones a secundaria y formación profesional celebradas hace unas semanas.
REDACCIÓN. Murcia
A la prueba concurrieron más de 5.000 docentes para 506 plazas. En algunas como matemáticas ninguna nota pasa del seis y apenas cubren las vacantes ofertadas. Lo mismo ocurre en Física y Química mientras que la FP dejaban plazas desiertas. Es algo excepcional en opinión de la Asociación de interinos cuyo presidente, Ángel Luis Martínez, asegura que no se ha visto nada parecido en otra comunidad. Apunta con ironía que solo en Murcia parecen haberse presentado los menos competentes. Les cuesta creer que sea algo casual.
Se han presentado reclamaciones pero según Angel Luis Martínez, tienen pocas opciones para prosperar porque no pueden ir más allá de revisar una copia del exámen-ni siquiera el original- ni conocer los criterios de corrección.
CCOO lamenta que hayan quedado desiertas algunas tras la primera fase de las oposiciones, califica de especialmente complejos los ejercicios prácticos y la dureza del procedimiento de corrección. Cree el sindicato que, en cualquier caso, lo que hay que plantearse es el cambio en el sistema de pruebas.
El responsable de la federación de enseñanza, Diego Fernández, considera que las oposiciones han sido muy duras sobre todo en algunas materias. Citaba casos prácticos de los que no se tenía preparación por desconocimiento o exámenes muy severos en algunas materias científicas en las que se ha penalizado con hasta seis puntos menos por faltas ortógráficas o de puntuación.
Diego Fernández cree que la mejora de la calidad en la escuela pública pasa por acabar con la interinidad y convocatorias como la pasada. No la favorecen de ahí exigiendo su modificación.
Los testimonios que ha podido conocer Onda Regional de Murcia de opositores en esta convocatoria de secundaria apuntan a que se han utilizado criterios muy severos de corrección, dándose el caso de que, por ejemplo, algunos exámenes de inglés que estaban para notas altas se han quedado rozando el cero por haber utilizado incorrectamente los puntos y las comas o por falta de coherencia en el dicurso.Se conoce el caso de un opositor que reclamó por tener un 4'7 y sólo le han subido la nota hasta el 4'9983, sin llegar al 5 del aprobado.
Estos testimonios apuntan a que los criterios de corrección que se han dado a los tribunales han sido severísimos, hasta el punto de que no todos los miembros de esos tribunales estaban de acuerdo y algunos han manifestado su descontento incluso con lágrimas.
