EL ROMPEOLAS. Historias de una madre imperfecta. El origen del maquillaje de ojos
Una forma de realzar la expresión de los ojos es maquillarlos, y Clara Alarcón nos cuenta que esta práctica es casi tan antigua como la humanidad misma, ya que empezó en la Edad de Bronce, 3.500 años a.C. El origen de todo es el 'khol', un cosmético en polvo compuesto originalmente por minerales machacados como la galena o la malaquita. Actualmente, está compuesto por otros minerales más inofensivos, como el polvo de carbono amorfo, una forma de hollín de origen vegetal inofensivo y de gran intensidad en su color negro.
Diversas civilizaciones lo utilizaron como un ungüento ideal para proteger los ojos debido a sus propiedades bactericidas; una de esas civilizaciones fue la egipcia, donde lo usaban tanto los hombres como las mujeres. Desde la antigüedad, se estila aplicarlo en los párpados para oscurecerlos y así evitar daños ocasionados por la luz solar.
En algunos lugares, el khol árabe no solo se usaba para embellecer el rostro o evitar daños en los ojos, sino también como una medida de protección contra el mal de ojo y otros tipos de magia. Mucho después vendría la máscara de pestañas o ‘rimel’, inventada en el siglo XIX por el empresario francés Eugène Rimmel.