Andrés Campoy, portavoz de los vecinos de Santiago el Mayor, dice que ha sido un fin de semana intenso, en el que no se han registrado incidentes, y que les ha permitido compartir su problema con otras personas
REDACCIÓN
Con la lectura de un manifiesto y la celebración de un almuerzo de despedida, en el que no han faltado migas y calçot, concluían los actos organizados este fin de semana en el encuentro vecinal que, bajo el nombre "Murcia no se parte", ha reunido a centeneras de vecinos de los barrios del sur de la ciudad y a casi 300 personas procedentes de Cataluña, Valencia y Andalucía para reivindicar el soterramiento de las vías de tren.
Ayer realizaron una concentración en el paso a nivel de Santiago el Mayor y un acto de bienvenida para los grupos que venían de otras ciudades. Hubo música, lectura de manfiestos y una cena murciana preparada por los vecinos de Santiago El mayor. La portavoz del grupo catalán, Yolanda Almirall, asegura que se han sentido muy bien acogidos.
Como broche final a todos los actos realizados, la delegación catalana ha querido otorgar un premio a doña Ana, conocida como "la abuela de las vías", para reconocer su lucha en defenesa del soterramiento. Así lo explicaba Pau Font, uno de los organizadores.