Es el tenista más joven en ganar los tres torneos de Estados Unidos: US Open, Indian Wells y Miami.
GREGORIO LEÓN
El gesto contraído de dolor. La mueca de la decepción, del estupor de que sea tu propio cuerpo el que te sabotea, desbaratando tus planes, haciendo añicos tus ilusiones. Fue en Río de Janeiro. Y ese Carlos Alcaraz cojo ha mudado en pocas semanas, gracias al trabajo de un yeclano con manos de oro, Juanjo Moreno. Ha regresado en California el Alcaraz atómico que pulveriza a sus rivales, sea cual sea su tamaño, currículo o antecedentes. Medvedev, que da más miedo que un ogro en una noche de relámpagos, fue reducido a la nada. Y los registros siguen cayendo, alimentando la leyenda de un murciano que corre más que nadie.
Estados Unidos le sienta bien a Carlitos. En su piel lleva tatuada la fecha en la que alcanzó la cima en Nueva York. Meses antes, el confeti lo bañó en Miami. Y ahora su sonrisa se ha ensanchado en Indian Wells. Es el tenista más joven en reunir en su colección los tres grandes del país que gobierna Joe Biden. Pete Sampras lo hizo con 22 años. Federer, con 23. Djokovic tuvo que esperar a los 24. Y otro tótem del tenis, André Agassi, lo hizo ya treintañero.
Su actuación en California ha sido prodigiosa. No ha cedido ni un solo set, y otra vez hay que rebobinar mucho para encontrar precedentes. Uno corresponde a Rafa Nadal, allá por el año 2007. Y el más cercano es de Roger Federer, quien también se llevó Indian Wells con una hoja de servicios impecable, en 2017.
El Hard Rock Stadium ha celebrado el sorteo del cuadro individual del Masters 1.000 de Miami. Y ha dibujado el camino de Carlos Alcaraz hasta una posible final. El actual campeón empezará con el ganador que jugará el argentino Facundo Bagnis contra un jugador que viene de eliminatorias previas. En la tercera ronda se podría encontrar con Andy Murray. Habría más curvas en la siguiente, contra Taylor Fritz o Helger Rune. El danés ya le ganó en noviembre pasado, en París-Bercy. Las semifinales le podrían colocar de nuevo delante a Jannik Sinner, igual que en California. Y en la final, Daniil Medvedev o Tsitsipas.