Agustín Ramos, a Onda Regional: "Tengo 'feeling' personal con Felipe. Lo aprecio y por supuesto que estaré encantado de hablar con él, y buscar siempre lo mejor para el Murcia".
GREGORIO LEÓN
"En la vida a veces los polos se vuelven a juntar y crean electricidad". La frase la dejó, como esculpida en mármol, Felipe Moreno en los estudios de Onda Regional de Murcia, este martes, abriendo la posibilidad a reemprender negociaciones con Agustín Ramos. "Y yo encantado de tomar ese café con Felipe. Aún estamos a tiempo", reaccionó de inmediato Agustín Ramos, en conversación con Juan Cervantes, jefe de deportes de La7 TV.
La jornada de este miércoles ha permitido ahondar en esa idea. Las dos partes están dispuestas a reencontrarse. El gobierno de coalición diseñado en origen, y que dibujado presentaba un aspecto muy deseable, sonaba muy bien, es de difícil aplicación práctica. Los dos lo saben, aunque ni siquiera retomar ese modelo ha sido descartado radicalmente por ninguna de ellas en estos momentos.
Agustín Ramos está escuchando a su familia, que querría que se apartara. La presidencia del Real Murcia exige una dedicación casi plena, con un enorme desgaste, y siempre está sujeta a críticas y a vaivenes emocionales. Pero la idea del abaranero es continuar hacia adelante, y más con el nuevo mapa accionarial que puede salir de la junta de accionistas del próximo 8 de marzo, que le colocaría, caso de ser aprobados los dos primeros puntos, con un 35 por 100 de las acciones, equivalentes a 2.580.00 euros. Una cantidad que tiene previsto ampliar en otros dos millones. El presidente murcianista, en conversación con Onda Regional, le ha tendido la mano a Moreno: "Tengo 'feeling personal con Felipe. Lo aprecio y por supuesto que estaré encantado de hablar con él, y buscar siempre lo mejor para el Murcia".
Desde la zona noble del estadio Nueva Condomina-Enrique Roca se lanza un mensaje relativo a la ampliación de capital, vehiculada a través de préstamos convertibles, que figura en el punto 3 de la junta de marzo: el Consejo de Administración no ha pensado en egos, sino en el Murcia y en la necesidad de capitalizarlo lo máximo posible, y por eso han fijado una cantidad de hasta 8 millones de euros. Si Felipe Moreno, o cualquier otro empresario, los aportara, se quedaría con la mayoría y el control del club: 52 por 100 de poder. El capital social, caso de suscribirse la totalidad de las acciones, se elevaría a 15.377.000 euros. Ramos no quiere perpetuarse en el poder.
