Los grana consiguieron la primera victoria de la temporada, con remontada. Rodri Ríos y Álex Rubio anotaron los goles del Murcia.
GREGORIO LEÓN
La temporada de los sueños arranca con remontada. Con victoria de las que dejan en el paladar un sabor muy dulce. Cuando parecía que el Real Murcia podía volver de vacío de Granada, su fe y la calidad de sus futbolistas permitió un triunfo visto en directo por mil murcianistas en los Nuevos Cármenes.
El equipo grana, con la chispa de Carlos Rojas, muy vertical por su carril, comprometió al Recreativo Granada. Pero ese comienzo esperanzador no tuvo continuidad, y el Murcia perdió la pelota. El enemigo se apropió de ella. Un remate de Talaverón, dentro del área chica, sobresaltó a los aficionados murcianistas. Menos mal que la pelota no cogió dirección, igual que un disparo exterior de Pablo Sáenz.
Los problemas iban a crecer en la segunda. Al intentar despejar un balón, Montoro introdujo la pelota en su portería. Era el minuto 13.
Gustavo Munúa reaccionó, modificando el equipo con varios cambios que le dieron mayor velocidad a la circulación de la pelota. Y fue así, en el minuto 39, como llegó un centro de Marc Baró aprovechado por Rodri Ríos, quien se adelantó a los centrales granadinos para colocar en el electrónico el 1-1.
Y en el minuto 93, un pase excelso de Pedro León habilitó a Álex Rubio, que definió con maestría.
