El nuevo vicepresidente del Jimbee está convencido de que los títulos para el equipo cartagenero llegarán, tarde o temprano.
GREGORIO LEÓN
Con casi 500 goles firmados, muchos de ellos museísticos, Paulo Roberto sigue siendo el goleador más prolífico que jamás ha tenido ElPozo Murcia. Una tentativa fallida de jugar en el Atlético de Madrid le brindó la posibilidad de desplegar todo su talento brasileño en el fútbol sala. Y el club murciano, en una operación de resonó en toda España, se llevó a una estrella rutilante que todavía brilló aún con más potencia en el Palacio de los Deportes. Dueño de unos regates indescifrables para el rival, su juego tenía mucho de burla, del fino engaño que solo está al alcance de los grandes gambeteadores de la historia, desde Garrincha a la actualidad. Pero un día el duende decidió descansar. Era la hora de la retirada. Pasó a ocupar un asiento en los despachos. Aquella etapa no fue prolongada. Y catorce años después de abandonar las responsabilidades ejecutivas en ElPozo, Miguel Ángel Jiménez Bosque, en una jugada astuta, lo ha atraído para dar más vigor al proyecto Jimbee.
El fichaje, desvelado por Onda Regional hace una semana, inflamó las redes sociales, llenándolas de exabruptos y perplejidades. Muchos aficionados no olvidan episodios del hispano-brasileño en la vieja Bombonera, cuando el Mínguez Sáez era víctima del juego letal de Paulo. Las horas y la victoria retumbante en el Palacio en el derbi del sábado han actuado de analgésico. Paulo Roberto solo piensa en trabajar.
Aquí lleváis la entrevista completa...
