La piloto ceheginera, campeona del primer Mundial Femenino de Velocidad tras años de graves lesiones, asegura que "mi prioridad es continuar en el Paddock de Superbikes" pero no desvela aún si cambiará de categoría
Ana Carrasco es la primera campeona del Mundial Femenino de Velocidad que se creaba en este 2024 dentro del entramado de las Superbikes. La ceheginera, que ya logró en 2017 levantar el título en SuperSport300 (categoría mixta), ha superado a María Herrera en una temporada que arrancó con tres triunfos seguidos de su rival. "Pero no tuve dudas en ningún momento. Estuve en mi sitio, sabía como iba a ser esto. Lo importante era no cometer errores e ir ganando cuando podía y subiendo al podio en el resto de carreras. Ha sido muy difícil, ha habido un nivel muy alto, pero las españolas hemos marcado la diferencia".
Para el recuerdo dos graves lesiones en el último lustro, una de espalda y otra de tibia y peroné en el tramo final de su temporada de Moto 3. "Estoy especialmente orgullosa de todo lo que hemos tenido que superar. Es una recompensa para nosotros. Pasé años difíciles. Por eso es algo increíble. Ser campeona del mundo una vez era un sueño, pero volver a lograrlo ahora era súper importante para mí".
Su futuro pasa por las dos ruedas, "en coches hago mis pinitos (compite en el Campeonato de España de Turismos), pero todavía continuaré subida a la moto. Mi prioridad es continuar dentro del paddock de Superbikes". No especifica en qué categoría, si en el Mundial Femenino o volviendo a una competición mixta.
