El murciano, preparador físico y readaptador de la selección, destaca las cualidades humanas de Morata y las ganas de aprender de Lamine Yamal.
GREGORIO LEÓN
Se les ve a los tres, sonrientes. Imposible disimular la felicidad después de tantas emociones, nervios, miedos y al fina, éxito. Las gradas han empezado a despejarse. Aún fosforecen los chalecos de los encargados de seguridad. Y arriba, colgado, un resultado. Grabado en piedra para la historia. España, 2 - Inglaterra, 1
Antonio Gómez ha hecho tanto las maletas y ha prestado sus servicios a tantos clubes y empresas que ha acumulado un puñado de experiencias memorables. Pero ninguna como la del domingo. Fichado el año pasado por la Federación Española de Fútbol, entró en el equipo de trabajo de Luis de la Fuente. Y desempeñando las funciones de preparador físico y recuperador, también es partícipe de este éxito que ha retumbado en todo el mundo. Más allá del protagonismo justo de los jugadores, el seleccionador es la imagen y la voz de España. Pero junto a él opera un elenco de profesionales acreditados que han tenido a los internacionales siempre a punto, con un rendimiento óptimo para afrontar todos los desafíos.
Este murciano del barrio de El Carmen, que iba con su padre y con su abuelo a La Condomina cuando era un niño, es hoy uno de los actores de este triunfo de España. Ha convivido muchas horas con los protagonistas en el césped. Y destaca las cualidades humanas de Álvaro Morata: "Es el capitán, con todas las letras". La revelación incuestionable ha sido Lamine Yamal: "Es especial. Un jugador que quiere aprender, humilde, y que escucha los consejos de los veteranos". Y por encima de todos, Luis de la Fuente: "Es un hombre increíble. Un ser humano excepcional, que siempre mira por el bienestar de los demás".
Ahí lleváis la entrevista completa...