El presidente Julián Luna ya se movió en octubre para iniciar el cambio de Territorial, ante la falta de apoyos económicos.
GREGORIO LEÓN
Julián Luna ya no tiene oxígeno económico suficiente para seguir adelante en solitario con el proyecto de La Unión. Da igual que ascienda de categoría el fin de semana en La Línea, o que se quede en Segunda RFEF. Y por eso desde el año pasado se está moviendo para encontrar socios. La única posibilidad que tiene es vender el club a un empresario andaluz que se llevaría al equipo a Málaga. Ya el mes de octubre del pasado cursó la petición oficial a la Federación Murciana, que llevará el asunto como punto del día a la asamblea que va a celebrar el próximo 21 de mayo. Serán convocados los setenta asambleístas, pero no es necesario que haya unanimidad, ni presencia de todos ellos. Con una mayoría simple de fotos afirmativos sobre negativos, la Federación daría sus bendiciones para que La Unión pudiera cambiar de Territorial. El primer paso ya lo ha dado el club, La Unión, cuyos socios aceptaron la propuesta del presidente Julián Luna. Y falta un tercer filtro, el de la Federación Andaluza, que siempre en términos lógicos, votaría a favor de esta modificación, al poder acoger en su seno a un nuevo club, bien en Primera o en Segunda RFEF.
El cambio de Comunidad Autónoma es legal. Lo permite el apartado 7 del artículo 117 del Reglamento General de la Federación Española de Fútbol: "Excepcionalmente la junta directiva de la RFEF podrá autorizar que un club compita en un marco territorial distinto al que naturalmente la corresponda, previo acuerdo de las Federaciones de ámbito autonómico implicadas, siempre que, previamente, lo aprueben la Asamblea General de la entidad de que se trate y, asimismo, las de las dos Federaciones implicadas, tratando cada una de ellas la cuestión como uno de los puntos del orden del día de la convocatoria".
Y será la Federación Española la que tenga la última palabra. A tal efecto, los servicios jurídicos deberán preparar un informe que será llevado a la asamblea que debata este cambio como punto del orden del día.