El equipo grana cae por 2-0 ante el Linares y se queda a siete puntos del 'play off' de ascenso.
GREGORIO LEÓN
El Murcia está empeñado en quedarse fuera de la promoción de ascenso. Y lo va a conseguir. Es perseverante en esa tarea. Y se afana en fallar en los días señalados en el calendario. Se quedó mudo ante el Intercity, con la Nueva Condomina inflamada. Y también este domingo, en Linarejos, donde volvió a sonrojar a su afición, con una actuación muy alejada de lo pedido por la cita. Inapetente. Bloqueado. Inerme. Y extraviado. Ese fue el Murcia, que ha dejado pasar el último tren.
El guion del partido saltó por los aires muy pronto. El Murcia llegó tarde al partido. Sin tensión defensiva, laxo, permitió una acción en su banda derecha. Rafa Llorente, sin la vigilancia de Enol Coto, con la ayuda tardía de Álex Rubio, vio un boquete óptimo para introducir el balón. Y allá que fue, con un disparo colocado. Manu García se lanzó, pero la bola iba muy ajustada.
La réplica grana fue tímida. Es cierto que gobernó el partido, pero con ataques inocuos. Todo eran desplazamientos laterales que nunca encontraban Carrillo o Álex Rubio. Ni siquiera el hilo conductor de Isi Gómez era suficiente para comprometer al Linares.
La segunda parte dejó un susto extraordinario. Berlanga bajó la pelota al piso y remató a la red. Menos mal que un jugador del Linares interfería en la jugada, tapando a Manu García. El portero grana fue noticia en el 2-0. Una falta lanza con mucha comba hizo salir a destiempo al meta murcianista, Y Molina anotó el segundo gol del Linares.
En medio de la ofuscación del equipo de Pablo Alfaro, Rafa Llorente estuvo a punto de hacer el tercero. La madera lo evitó. Ya estaban en el campo Tomás Pina y Amín, pero tampoco las rotaciones dieron más músculo y posibilidades a los grana. Y la única oportunidad nítida fue un disparo de Loren Burón que un defensor salvó in extremis.
Y el partido fue muriendo en medio de esfuerzos inútiles del Murcia. El Linares sale de descenso. Y el equipo murcianista vuelve a defraudar a su afición, otra vez descorazonada. La hinchada ve la clasificación y no le salen las cuentas, ni siquiera con el empate del Recreativo ante el filial del Atlético de Madrid, que deja al Murcia a siete puntos de la zona de 'play off'. La misma que hay respecto al foso del descenso. En tierra de nadie.
