Los universitarios necesitaron dos prórrogas para batir al conjunto húngaro y tras la derrota del Nymburk allana su camino para ser campeón de grupo. El equipo bajó en la segunda parte y estuvo a punto de costarle caro
El UCAM Murcia ganó en Hungría al Falco (90-104), tal y como se le exigía. Un resultado engañoso a todas luces porque necesitó de dos prórrogas para sumar un triunfo que le deja como colíder, empatado con Nymburk y Nanterre después del triunfo de los franceses en la pista checa. El UCAM sigue dependiendo de sí mismo para ser primero, es cierto, pero ahora lo tiene más fácil. Ya no necesitaría ganar a los checos por más de 15 puntos.
Se complicó solo el conjunto de Sito Alonso. Tras un arranque arrollador (9-20), los universitarios fueron gestionando la renta durante el primer tiempo. Un parcial 8-0 acercó a los magiares, pero sin llegar a ponerse por delante. El juego del UCAM fue decreciendo y su rival lo aprovechó hasta el punto de poner en apuros a los murcianos. Muchas facilidades que el Falco aprovechaba para llegar al 75-75 con el que acabó el tiempo reglamentario después de que Ennis marrase el último tiro.
Ya en el tiempo extra, el UCAM volvió a desperdiciar una ventaja de +6 en la primera prórroga, pero no así en la segunda en la que se puso serio y pasó del 88-86 al 90-104 (parcial de 2-18) con el que sustentó su triunfo final. Destacaron Hakanson (letal en el tiro libre), Kurucs y Birgander (especialmente en el rebote), Gates con sus triples y Radebaugh metiendo intensidad al equipo. Próxima cita continental, el miércoles 12 (20:30 horas) en el Palacio de nuevo ante Falco. Entre medias, visita liguera al líder, un Real Madrid al que nunca derrotó en la capital de España. Deberá jugar mejor que lo visto en este partido.
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