Asier Goiria seguirá como director deportivo. No habrá revolución en la plantilla.
GREGORIO LEÓN
No es fácil metabolizar un fracaso como el del sábado. Con una atmósfera incandescente de Primera División, treinta y un mil personas llenando a rebosar las gradas de Nueva Condomina como nunca antes había ocurrido, la asunción de la realidad de que el Murcia seguirá un año más en el tercer escalón del fútbol español exige de un gran esfuerzo. Y en ello andan los responsables principales del Real Murcia, al compás de la afición. Pero Felipe Moreno se pone ya a trabajar este martes, con una primera reunión con la comisión deportiva. El presidente grana ya le ofreció la renovación hace varias semanas a Asier Goiria, y este le emplazó a la finalización del 'play off'. Una vez concluso, falta la respuesta del director deportivo. Será afirmativa. Goiria entiende que tiene una espina clavada, depositar al Murcia en el fútbol profesional, y está muy a gusto en el club y en la ciudad. Le dirá que "sí" a Felipe Moreno.
Por contra, se da por segura la salida de Fran Fernández. Desde la cúpula directiva no hay pronunciamiento al respecto. Se guarda silencio, por respeto a Fran Fernández. Pero Felipe Moreno ha ido dando pistas durante el curso. La erosión en la confianza hacia el trabajo del entrenador ha sido visible, expresada elocuentemente en la rueda de prensa que dio el dirigente cordobés antes del partido de casa ante el Fuenlabrada. Una derrota habría provocado la caída del técnico. Fue el momento de menor crédito de Fran Fernández. El Murcia accedió a la promoción de ascenso a Segunda, después de siete años. Pero eso no es suficiente a ojos del Consejo de Administración. El objetivo de saltar a la LFP no se ha cumplido, ni por la vía directa de campeón de grupo, ni por la secundaria del 'play off'. El entrenador tiene contrato renovado por meter al Murcia en la promoción. Para el caso altamente probable de que decida cortar la relación contractual que tiene con él, deberá llegar a un acuerdo económico.
Sin revolución en la plantilla
La comisión deportiva no quiere caer en errores de otros años. No va a meter la pala, como ocurrió otras temporadas, la última, sin ir más lejos. Goiria se encontró con una plantilla diseñada por otro profesional, Javier Recio. Pero ahora sí tiene jugadores contratados por él, que han dado un rendimiento muy interesante. Gazzaniga es uno de los ejemplos. Y en esa línea va a trabajar el vasco, ofreciendo renovación a los jugadores que han cumplido con su trabajo y son válidos para el nuevo Murcia 2025/26. En la continuidad está el éxito. Esa es la frase que resume la doctrina de los dirigentes murcianistas.
Este martes se celebrará la comida de despedida. Los jugadores y el cuerpo técnico están citados por el club para un último acto colectivo antes del comienzo de las vacaciones.
Mantener la masa social
El partido del sábado dejó una derrota deportiva y una goleada social. Las 31.003 personas que llenaron los graderíos de Nueva Condomina, dejando una imagen para la historia, ejemplifican la salud del murcianismo. Sí, era un partido especial. Un partido de colección. Pero un partido de pago. Y la hinchada respondió como ocurre en pocos clubes de España. Y esa valor sagrado es que quiere preservar Felipe Moreno, para que también la próxima temporada ofrezca entradas espectaculares. El cordobés, aunque todavía está afectado por el desenlace del partido del sábado, va recomponiéndose para diseñar el Murcia del futuro. Y además del sentido de gratitud hacia los aficionados que han apoyado al equipo desde que él llegó, le recorre por dentro el deber de darles un lugar entre los elegidos, entre los que pertenecen a la aristocracia. Los del fútbol profesional. Los del fútbol Movistar. De ese fútbol que no se ve con unas claves en un ordenador, sino dándole a un botón.