Jiménez: "Queremos que el Palacio sea la casa de todos los cartageneros"

Hace seis años, en verano de 2.018, Jimbee puso los cimientos y a partir de ahí comenzó a edificar un proyecto deportivo que no sólo ha logrado conquistar a cientos de seguidores y aficionados sino que ha alcanzado algo tan difícil como es ser campeón de Liga. En poco más de un lustro, Jimbee ha metido al fútbol sala cartagenero en lo más alto, en un lugar que está destinado a sólo unos pocos.

Lo que se vivió en la final de la Liga en el Palacio ante ElPozo Murcia será difícil de olvidar para la afición cartagenera, que ya piensa en nuevos retos, uno de ellos Europa, donde se estrenará el Jimbee en el mes de octubre. La ilusión se palpa en el ambiente, en las calles. Y ya son más de 2.000 los que han retirado sus abonos para la próxima temporada. El presidente del club, Miguel Ángel Jiménez, ha señado en Región Deportiva, edición mediodía, que "el año pasado tuvimos mil y pico y este año creo que estaremos sobre los 3.500, una vez que empiece el curso, después del verano". Pero lo más importante para Jiménez Bosque no es ya sólo el número, que lleva camino de batir récords, sino el hecho de que no se pierda ese gran ambiente que se vivió hace sólo unas semanas. "Queremos que el Palacio sea la casa de todos los cartageneros. Y estamos trabajando en un modelo muy bonito con las peñas y con las empresas, que sea un punto de encuentro para todos, para las familias".

Jiménez se muestra muy contento con el trabajo de Duda, al que siempre elogia y considera parte fundamental en la maquinaria. Afirma que se ha logrado una plantilla tan buena o mejor que la de la última temporada, a pesar de que se han marchado algunos jugadores. Entiende que las seis incorporaciones son de gran nivel. Sobre el hecho de tener que defender el título liguero ha explicado que "más que vértigo lo que tenemos es una gran responsabilidad". Sabe el presidente que una Liga no se gana todos los días y que va a ser muy difícil repetirlo, aunque no imposible, claro.

Europa es un reto que también ilusiona y mucho al presidente del Jimbee Cartagena, que se muestra crítico con el modo en que se está llevando este deporte, a veces tan maltratado. "Si queremos que el fútbol sala sea lo que queremos, tiene que ser olímpico. Y que la Liga y la Federación lleguen a un punto de encuentro y tenga más visibilidad. Es un deporte que practica mucha gente, de los que más licencias tiene. Merece tener un respeto y que se le dé el valor que tiene".