Miles de aficionados recibieron al Real Murcia antes de su partido contra el Ceuta.
GREGORIO LEÓN
La afición del Real Murcia decidió jugar el partido mucho tiempo antes de que empezara a rodar en el césped en el césped de Nueva Condomina. Miles de seguidores esperaban el autobús, que llegó a las seis y media de la tarde, como si se tratara del encuentro del ascenso. Un ambiente de Primera División.
La venta de entradas ha sido espectacular toda la temporada. Lo que parecía un sueño quimérico del presidente Felipe Moreno el lunes, colgar el cartel de "no hay billetes", se hizo realidad a las 18.46 de la tarde, cuando faltaba más de una hora para que el árbitro decretara el inicio del choque.