El murciano presenció la final del Masters 1000 de Shanghái junto al suizo y también entrenaron. Carlos participa este miércoles en un torneo de exhibición en Arabia Saudí y si vence a Rune jugará el jueves contra Nadal
Carlos Alcaraz vive días de ensueño. Pese a la eliminación en cuartos de final del Masters 1000 de Shanghái frente a Machac, el fin de semana se cerró haciendo realidad una de sus grandes aspiraciones: estar junto a Roger Federer. Alcaraz había declarado en más de una ocasión que el único contacto que ambos tuvieron en el pasado fue un entrenamiento en Wimbledon, siendo Carlos aún juvenil. Aquel chico es ahora toda una realidad y está llamado a suceder a la leyenda helvética como uno de los grandes dominadores del tenis del presente y del futuro. Tras poder saludarle en la Laver Cup, en Shanghái fue más allá. Siempre con la mediación de Juan Carlos Ferrero, entrenador de Alcaraz y ex compañero de circuito de Federer, estos tuvieron la oportunidad de ver juntos la final entre Sinner y Djokovic y también entrenarse de cara al próximo reto del murciano: el Six Kings Slam de Arabia Saudí.
Un sparring de lujo para Carlos, que en menos de una semana tendrá también otro sueño por cumplir. El murciano podría ser el primer rival que tenga Rafa Nadal después de que el balear anunciara su retirada del tenis profesional. Ambos van por el mismo lado del cuadro en el torneo de exhibición. Nadal espera en semifinales al ganador del Holger Rune-Carlos Alcaraz que se celebra este miércoles. El murciano se codea con el Big Three, luchando contra Djokovic en la pista, entrenando con Federer y acompañando a Nadal en sus últimos partidos como profesional, tanto en Riad como en la final de la Copa Davis de Málaga. Allí, Alcaraz intentará ofrecer a su otro ídolo, Rafa, la ayuda necesaria para poner el broche a su carrera levantando su sexta Ensaladera.
