El consejero delegado del Real Murcia señala al filial como vía para reforzar al equipo, en caso de necesidad
GREGORIO LEÓN
Con la sonrisa aún colgada en la boca por el triunfo en Castalia, el Real Murcia mira al horizonte con un calendario que se le ha llenado de citas excitantes. La final de la Copa Federación se jugará en Nueva Condomina. La fecha que más convence al equipo de gobierno grana es la del 4 de diciembre, miércoles. Está previsto que Luis Rubiales sea quien entregue el trofeo al ganador. Luego llegará el Racing de Santander y la Copa del Rey. Y por supuesto, los desafíos semanales de la Liga.
Francisco Miró es una de las figuras prominentes del Consejo de Administración. El consejero delegado de la entidad grana se muestra reacio a reforzar la plantilla actual. Para empezar, recela de los fichajes de invierno. Y además, mira al filial como posible solución. La actuación sobresaliente de Silvente o Pedrosa ante el Castellón abre posibilidades a Adrián Hernández.
El directivo grana también se pronuncia sobre las reivindicaciones planteadas por Raúl Moro, quien quiere hacer valer el 10 por 100 de Corporación Empresarial Augusta para acceder al Consejo de Administración, colocando en él a alguien de su confianza. Miró veda esa posibilidad, remitiéndose a la Ley de Sociedades de Capital.
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