La emisión de obligaciones convertibles en acciones, nuevo solución explorada por el Consejo de Administración
GREGORIO LEÓN
El Real Murcia necesita una inyección de liquidez para no ver comprometidos pagos futuros. Una de las obligaciones que debe atender de manera inexorable es el pago de las cantidades pactadas con los acreedores concursales con los que alcanzó acuerdo. La cantidad se acerca a los 500.000 euros. Sin taquillas, con patrocinadores renuentes a aportar dinero, paralizados por el miedo de una pandemia que no tiene fecha de fin, los dirigentes de la entidad grana están explorando todas las posibilidades. El Consejo de Administración se plantea la emisión de obligaciones convertibles en acciones, que tendría los mismos efectos que la suscripción de préstamos transformables en acciones, que fue la fórmula elegida a finales de 2019, y que permitió capitalizar al Murcia con una cifra de 800.000 euros.
En la zona noble del club sí tienen muy claro que será la junta de accionistas, prevista para últimos de diciembre, la que determine el camino a tomar. En noviembre de 2019 el proceder fue distinto. El Consejo de Administración atrajo a su proyecto a varios empresarios, que prestaron dinero al club, que después convirtió esas aportaciones en títulos nominativos. Fue así como Enrique Roca, por ejemplo, se hizo con un paquete accionarial grueso (220.000 euros), escalando hasta el segundo puesto en el ranking de mayores accionistas del club. KBusiness reforzó su posición preeminente con la suscripción de préstamos por valor de 150.000 euros. Y Mariano Albaladejo, de Gesa Mediación, volvió a mojarse con una aportación de 70.000 euros.
El Consejo de Administración someterá a la consideración de la junta de accionistas la pertinencia o no de realizar una nueva ampliación de capital, fórmula nuclear de la que se ha valido el Murcia para dotarse de liquidez. Esa ampliación puede verse complementada con las dos soluciones expuestas: emisión de obligaciones o préstamos convertibles.