El equipo de Tornel, reunido este viernes, decide seguir adelante, para salvaguardar los intereses del Real Murcia. De la Vega llamó por la noche a Tornel, quien le ha expresó que lo que necesita el Murcia es dinero.
GREGORIO LEÓN
El Consejo de Administración del Real Murcia era este miércoles un boxeador sonado, que ha recibido un golpe que parece definitivo. La sentencia emitida por la Audiencia Provincial lo dejó sin oxígeno. Pero el púgil, cuando el árbitro ya cantaba la cuenta de los diez segundos, se ha erguido. El equipo directivo grana ha hecho acopio de fuerzas para enfrentarse a Mauricio García de la Vega. Si el miércoles, con rostros funerarios y tono grave, avanzaban que dejarían el club cuando acabara la temporada, 48 horas después renuevan su intención de seguir defendiendo los intereses de la entidad. Y esgrimen que no es un capricho: hay dos ampliaciones de capital por salvar. La primera, tumbada por la Audiencia Provincial, aún tiene una última instancia judicial que la salve o la anule definitivamente en sentencia firme: el Tribunal Supremo. La segunda, también impugnada por el empresario mexicano, está pendiente de resolución.
Desde el equipo de gobierno grana quieren preservar las aportaciones dinerarias hechas por más de 30.000 accionistas, que capitalizaron el club en más de 2'9 millones de euros, sacándolo de causa de disolución. Y eso, evitar a toda a costa el riesgo de liquidación del club (ahora estaría de nuevo en motivo de extinción, de ejecutarse la sentencia de la Audiencia Provincia), es lo que mueve al Consejo a dar este paso. Y no abandonarán sus responsabilidades hasta que haya sentencia firme en los diferentes procedimientos abiertos.
El Consejo de Administración ha celebrado una reunión de carácter extraordinario esta tarde, presidido por Francisco Tornel. Y a su conclusión, ha emitido un comunicado, que arranca aclarando que "estamos abiertos a cualquier vía de negociación para dar seguridad jurídica al club, pero siempre manteniendo como condición necesaria la defensa de todos los accionistas". El actual equipo ejecutivo murcianista también expresa con rotundidad que "defenderemos los intereses del Murcia y de sus accionistas actuales en sede judicial, utilizando todos los recursos y medios".
La llamada
Ya por la noche, a las 21.30 horas, Mauricio García de la Vega ha marcado el teléfono de Francisco Tornel, y le ha expresado su deseo de ayudar en la gestión del club, sin ánimo de expulsarlo del equipo de gobierno grana. Tornel le ha respondido que el Murcia lo que necesita es dinero, recordándole que son precisos 500.000 euros para acabar la temporada. Pasadas las diez de la noche, Mauricio García de la Vega, a través de su cuenta en Twitter, ha informado también de este contacto, y añadiendo una frase expresiva: "Todo por buscar lo mejor para el Real Murcia". Una comisión específica creada dentro del Consejo llevará a cabo el proceso negociador con el empresario mexicano.