Loading

Óscar Carazo, la pieza secreta en la "Operación Toral"

El secretario técnico del Betis ya se llevó a Antonio Toral al Real Madrid en 2016. El jugador lo tiene claro: necesita salir del Murcia para buscar nuevos horizontes profesionales.

GREGORIO LEÓN
11 AGO 2025 - 21:00
Toral
Antonio Toral, con trece años, cuando fichó por el Madrid. Foto: Real Madrid

GREGORIO LEÓN

Óscar Carazo está empeñado en llevarse a Antonio Toral al Real Murcia. Y no es la primera vez que hace un movimiento en esa dirección. Este profesional trabajó durante once años en la cantera del Real Madrid, como responsable de captación de nuevos valores. Y descubrió en allá por 2015 al jugador de Pliego, cuando estaba en su primer año de infantiles, después de pasar por los alevines. Al club grana había llegado procedente del Nueva Vanguardia, donde ya empezaba a descollar. Y fue Óscar Carazo el que le planteó la posibilidad a Toral y a su familia de fichar por el Real Madrid. Todos lo tuvieron claro y en 2016 el extremo ingresa en Valdebebas, donde juega el segundo año de infantil y el primero de cadete. Su adaptación no fue sencilla. No disfrutó de los minutos que él pensaba iba a tener. Y ahí acabó su aventura en Valdebebas para regresar a su tierra. Y lo hizo enredado en dudas, deprimido, atropellado por una crisis de confianza que estuvo a punto de guillotinar su carrera como profesional del fútbol.  

Ahora Óscar Carazo, desde su puesto de secretario técnico de fútbol formativo, está pisando fuerte el acelerador para que Antonio Toral se ponga la camiseta de las trece barras. Una década después la certidumbre de que el futbolista de Pliego va a triunfar es total. Carazo ya apareció hace unos años ligado al Real Murcia. Nada más llegar al club grana Felipe Moreno, allá por marzo de 2023, sondeó el mercado en búsqueda de un director deportivo. Y una de las posibilidades que manejó fue la suya. Circunstancias familiares de Óscar Carazo impidieron que la operación  se cerrara. 

El jugador quiere nuevos horizontes

Antonio Toral guarda silencio. Igual que lo hace su representante, Joaquín Vigueras. Pero personas de su entorno dejan clara la posición del futbolista: quiere marcharse. Toral entiende que no ha tenido las oportunidades que merecía. Que lo han infrautilizado. Ni terminó de ser titular absoluto con David Sánchez ni con Cuéllar en el filial; y para incomprensión de muchos, tampoco Fran Fernández le dio pista, a pesar de su fútbol diferencial. Por eso quiere dirigir la mirada hacia otros horizontes profesionales. El Betis es un equipo de Primera, y aunque vaya a quedar ubicado en la plantilla del segundo equipo, el salto al primero puede producirse en cualquier momento. Y además, en el filial bético tendría a un entrenador fascinado por él: Javier Medina. Cuando lo vio jugar, contra su anterior equipo, el Antequera, quedó impresionado. 

Durante las últimas semanas ha habido negociaciones abiertas entre el Real Murcia y Toral para renovar su contrato. Desde el club grana se informa a Onda Regional de que había un principio de acuerdo de tres más dos años para que el jugador siguiera durante mucho tiempo vistiendo la camiseta grana, en condiciones económicas muy ventajosas. Pero pasaron los días y Toral y su agente no dieron el siguiente paso: aceptar plenamente la oferta grana y firmarla en un contrato. El Murcia asegura que el pacto estaba; el agente del futbolista tiene los labios sellados, igual que el extremo. Ni confirman ni desmienten tal principio de acuerdo. Las relaciones de Vigueras con los dirigentes murcianistas no son fraternales. Eso tampoco ha facilitado la posible renovación de su contrato. 

La cláusula de 750.000 euros

Con las negociaciones encalladas, la resolución de este caso no parece fácil. El Murcia cuenta con Toral. Asier Goiria y Joseba Etxeberria están encantados con él. En el club también se le tiene como un valor en alza, un diamante ya pulido. Un futbolista con el que viajar al fútbol profesional. Pero Toral quiere marcharse. Y el club, ante la determinación inflexible que se ha encontrado, solo tiene una respuesta: el abono de la cláusula de 750.000 euros. El Betis se niega a pagar la totalidad de esa cifra, pero existe una variante que podría reabrir negociaciones: la inclusión de alguna cláusula que otorgue compensación económica al club de Felipe Moreno en caso de un traspaso futuro.   

Los clubes de Primera División no vacilan a la hora de contratar a un jugador que les seduzca. Como ejemplo, el Real Madrid estaba dispuesto a pagar 250.000 euros por Guillermo Ruiz, otro de los futbolistas nacidos en la cantera del Murcia. La entidad que preside Florentino Pérez no hizo tal desembolso, pero sí permitió que Javi Rueda jugara en Nueva Condomina durante una temporada.  

Temas
Podcasts destacados