De nuevo falta de continuidad ofensiva grana y empate salvado en el 95'. Álex Rubio adelantó a un Villarreal B que hizo un partido serio. Moyita debutó como titular con buenas sensaciones. Jaso, otro central lesionado
El Real Murcia no arranca. Está muy lejos de lo que se le exige a un equipo campeón que aspira al ascenso directo. Empató ante el Villarreal B (1-1) y dando gracias. Un gol de Palmberg, en un balón colgado a la desesperada en el 95', permitió al cuadro de Joseba Etxeberria rescatar un punto. El partido era del filial amarillo, mucho más serio y que además se adelantó por medio de Álex Rubio en la primera mitad.
La única alegría de la noche fue Sergio Moyita. Debutó directamente como titular y dejó destellos mientras le duró el físico. Condujo, asistió y tomó el mando. En torno a él deberá construirse un equipo que no dio lo que se le espera durante los primeros 35' del primer acto (incluso tuvo el Villarreal B el 0-2 pero se anuló un gol a Viveros por fuera de juego). El final del primer tiempo sí fue del Real Murcia que se espera, con oportunidades de Ekain, Pedro Benito y Flakus. Pero apenas unos chispazos.
La segunda parte fue similar. Quintero perdonó el 0-2 tras un fallo del debutante Antonio David. Y ni con los cambios reaccionó. Pedro León, perdido en la izquierda, apenas podía aportar. Flakus marcó, tras un rechace, pero estaba en fuera de juego. Y cuando ya se daba todo por perdido, con más corazón que fútbol. Y sin merecerlo, Palmberg rascó ese empate valioso por lo visto sobre el campo. Y para colmo se lesionó en la rodilla Antxon Jaso. Con la baja de Saveljich, más problemas para Joseba.
