Carmen Martínez, delegada sindical del UGT en el hospital Santa Lucía de Cartagena, señala que tras el cierre de dos plantas en el hospital del Rosell son raros los días sin pacientes aguardando en los pasillos una cama
Las camas en los pasillos de Urgencias del hospital Santa Lucía son una realidad casi diaria desde noviembre pasado coincidente con el cierre de dos plantas en el Rosell. Abuelos, pacientes crónicos o de paliativos que necesitan monitorización aguardan cama en zonas sin intimidad, expuestos a corrientes de aire y en condiciones indignas, denuncia la Junta por la Defensa de la Sanidad Pública de Cartagena.
La presencia de camas en los pasillos de Urgencias se ha convertido en algo muy habitual y así lo corrobora la plataforma ciudadana de la que forman parte también profesionales sanitarios del área 2. Tras el cierre de dos plantas en el hospital del Rosell son raros los días sin pacientes aguardando en los pasillos una cama en planta. Lo explica la médica de Urgencias, delegada sindical de UGT en el hospital Santa Lucía y miembro de este colectivo, Carmen Martínez.
La médica se refiere especialmente al pasillo visible desde el túnel de Urgencias donde los pacientes esperan sin intimidad, expuestos a corrientes de aire, sin ninguna comodidad para sus acompañantes y en condiciones indignas. La causa, según la responsable de UGT, la negativa de la gerencia del Área 2 a invertir en personal.
El Servicio Murciano de Salud reconocía que el martes había cinco camas en los pasillos y cuatro el miércoles. Al mediodía de hoy ninguna, según las mismas fuentes. Sin embargo, la plataforma insiste en que el problema no es puntual y no debería normalizarse. Culpan directamente a la gerencia del Área 2 y denuncian que en los últimos años se ha producido una fuga de médicos de todas las especialidades desde Cartagena a otros hospitales de la Región donde cobran lo mismo con mejor trato, dice, y sin tanta presión asistencial.
