Los padres pasarán el domingo a disposición judicial, según ha confirmado el subdelegado del Gobierno en la provincia. Decenas de vecinos han guardado un minuto de silencio por la muerte del menor
La Policía Nacional ha detenido en Ciudad Real a un padre y una madre como presuntos autores de la muerte violenta de su hijo, un bebé de seis meses. El suceso se ha producido en una vivienda situada en la calle Toledo de la capital, un piso ocupado, según han indicado las mismas fuentes. La investigación se centra en esclarecer la autoría de los hechos, después de que los primeros indicios apunten a una muerte violenta del bebé.
Los hechos han sido comunicados a la Policía Nacional en torno a las 10.30 horas, tras recibirse llamadas de terceras personas alertando de lo ocurrido en el interior del inmueble. Hasta el lugar se han desplazado efectivos policiales y sanitarios, que no han podido hacer nada por salvar la vida del menor. La Policía Nacional mantiene abierta la investigación para determinar las circunstancias exactas del fallecimiento y el grado de participación de los progenitores.
Los padres pasarán el domingo a disposición judicial, según ha confirmado el subdelegado del Gobierno en la provincia, David Broceño, quien ha manifestado que la muerte de este menor constituye un asesinato. A preguntas de los medios de comunicación sobre el estado de las diligencias, Broceño ha insistido en la necesidad de actuar con prudencia para no entorpecer la investigación, y ha reconocido que no se pueden aportar más datos ya que hay que ser “muy cautelosos y cuidadosos, porque de cómo se haga la investigación depende que podamos ser efectivos con los presuntos responsables”.
Así lo ha trasladado tras el minuto de silencio que decenas de vecinos y representantes institucionales han guardado en la Plaza Mayor de Ciudad Real en señal de duelo y respeto por la muerte del bebé. Un acto en el que el alcalde de la ciudad, Francisco Cañizares, ha reconocido que el suceso ha causado una profunda conmoción y ha agradecido la amplia participación ciudadana.
“La incomprensión es absoluta ante cómo pueden pasar cosas así. Los niños y los menores deben ser siempre objeto de la mayor protección desde los poderes públicos”, ha afirmado Cañizares, quien ha recordado que se trata de “los seres más indefensos” y ha trasladado el apoyo de una ciudad “perpleja y profundamente dolorida” por la pérdida del bebé.