El mal tiempo en Andalucía reduce su presencia, mientras que la media cosecha en la Región de Murcia va 'viento en popa'
Las cifras de la almazara Villaolivo a media campaña son 2 millones de kilos, cifra que esperan duplicar, según comenta Juan Belchí, gerente de esta empresa familiar que trabaja con olivos del bajo Guadalentín, de Cartagena y Mazarrón. El mercado, que después de una subida tremenda se había moderado hasta bajar más de la mitad en el último año, ahora repuntará. Belchí calcula que en el supermercado llegaremos a ver el litro de virgen extra a 6,5 euros.
El mercado mundial está dirigido por los olivares de Jaén y de Andalucía en general pero, como decíamos, no han tenido una meteorología favorable, de modo que otras producciones, como la murciana, tienen mejores perspectivas.
En la almazara Valle de Ricote también están contentos, nos dice su gerente Tomás Guillén, aunque la humedad ha reducido el rendimiento.
Guillén comenta que en negocios como el que dirige se "atiende al autoconsumo, cultivar para consumir".
El caso de Villaolivo, en Alhama de Murcia, es representativo del camino escogido por las almazaras murcianas, buscando la calidad, las buenas prácticas agrícolas y todo lo que configura el cultivo ecológico.