Surgen empresas de 'desokupación' que se comprometen a desalojar la casa de sus okupas en 90 días con un precio que oscila entre los 3.500 y 4.500 euros
En la Región de Murcia durante el año pasado se registraron cerca de 500 procedimientos judiciales por ocupación de vivienda. A nivel nacional las denuncias por ocupación, usurpación o allanamiento de vivienda alcanzaron las 16.500. Un fenómeno que genera numerosos perjuicios a los propietarios pero también a Ayuntamientos, Policías y entidades bancarias. A raíz de este fenómeno han surgido numerosas agencias que se comprometen a desalojar la vivienda en menos de 90 días.
Según los datos de la Consejería de Fomento e Infraestructuras en nuestra comunidad hay 435 casos oficiales de ocupación ilegal, el porcentaje que representa con respeto al total de inmuebles de la comunidad es ínfimo, un 0.05% del total, sin embargo sigue considerándose un drama para aquellos que lo sufren, ya que el proceso de desalojo es muy lento en España. La media de espera para echar a unos inquilinos ilegales es de 18 meses.
Esto genera una sensación de impunidad e indefensión entre los afectados que lleva a adoptar otras medidas como contratar el servicio de agencias de desocupación, en las que por una cantidad de dinero se compromete a echar al ocupa en un plazo inferior a cuatro meses, según explica Rafael González, gerente de 'DS Desokupa'.
La policía identifica a los ocupas, de esta manera no pueden vender la llave de la vivienda a otros ocupas, algo que según González, hacen mucho alargando así el proceso de desahucio. En esos primeros momentos de conversación "la reacción de algunos no es muy amigable".
En la Región, según González, cada vez tienen más casos, con un promedio de entre 7 a 10 al mes. Rafael recuerda el trabajo en una casa donde encontraron un cultivo de marihuana. Un desalojo cuesta entre 3.500 y 4.500 y varía si en la casa a desocupar viven niños ya que el proceso es más complicado. González recuerda a los propietarios de las viviendas que no deben ofrecer dinero a los ocupas, aunque estén en una situación desesperada.