Tres incendios causados por cigarros mal apagados han carbonizado cuatro mil hectáreas de monte. Hasta el 3,5 % de lo que se quema cada verano es a causa de cigarros mal apagados
Detrás de tres de los incendios que han asolado nuestro país este verano había una imprudencia: la colilla de un cigarrillo mal apagada. Esta ha sido la causa de los fuegos de Méntrida en Toledo, Xixona (Alicante) y el de la localidad gallega de Foz. Estos tres siniestros han carbonizado 4 mil hectáreas. Desde la Asociación NoFumadores reclaman un endurecimiento de la ley que prohiba fumar en espacios naturales.
Desde esta organización consideran que si esas limitaciones en el consumo de tabaco ya no están en marcha es por la presión que hacen la compañías tabacaleras. Arrojar colillas encendidas puede suponer un delito de incendio forestal castigado con multas, inhabilitación y penas de prisión que pueden llegar a los 6 años. Entre el 3 y el 3,5 por ciento de los fuegos podrían estar causados por colillas más apagadas. De media, 2 hectáreas de bosque arden cada año en nuestro país por esto.
La presidenta de Nofumadores, Raquel Fernández, señala que "son pirómanos accidentales porque está muy normalizado el tirar la colilla al suelo y lo tenemos que cambiar con concienciación y con leyes porque las leyes también conciencian".
Nofumadores aspira a que la nueva Ley del Tabaco en tramitación imponga la prohibición de fumar en parques nacionales y espacios naturales protegidos. También quieren hacer extensiva esta limitación al consumo de tabaco dentro de vehículos. La Asociación Nofumadores ha reunido ya 80 mil firmas en Change.org para pedir esto. Fernández afirma que "abogamos porque directamente no esté permitido ni fumar dentro de un coche, así no se tirará la colilla fuera y provocar un incendio por negligencia".
