Dos votaciones por la mañana y dos por la tarde: así es la nueva dinámica del cónclave a partir de ahora
Miles de personas han abarrotado la plaza de San Pedro del Vaticano para conocer si hoy había o no nuevo papa. Y muchas más, incontables, han estado atentas a sus dispositivos móviles y televisores, pendientes también de la chimenea utilizada durante el cónclave para emitir la fumata, la chimenea de la Capilla Sixtina, que es un tubo metálico que se instala específicamente para este acontecimiento en el techo de la capilla, y que libera el humo blanco o negro que indica el resultado de las votaciones. La fumata estaba programada para eso de las 19:00, pero se ha retrasado dos horas.
Los 133 cardenales electores que forman parte del cónclave se han encerrado este miércoles por la tarde en la Capilla Sixtina para designar al papa que suceda a Francisco, fallecido el pasado 21 de abril. Permanecerán aislados hasta la elección del pontífice. El cónclave es el proceso de votación secreta en el que los cardenales electores eligen al nuevo papa.
El elegido será el pontífice número 267 de la historia y su trabajo será guiar a los 1.400 millones de católicos del mundo. El 80 % de los cardenales electores fueron designados por Francisco. Proceden de 76 países.
Cada votación se anuncia con humo: si la fumata es negra, no hay acuerdo; si es blanca, significa que un nuevo pontífice ha sido elegido y será presentado al mundo con la tradicional frase: “Habemus papam” (tenemos papa).
Los cardenales llamados a votar por tener menos de 80 años han celebrado este miércoles por la tarde la primera votación y, tal y como era de prever, de ella no ha salido el elegido. Fumata negra. Como ningún candidato ha obtenido la mayoría de dos tercios necesaria (89 votos de los 133 cardenales electores), el cónclave se retoma este jueves. A partir de ahora se celebrarán dos votaciones por la mañana y dos por la tarde, aunque sólo habrá una quema de papeletas por turno, es decir, habrá una fumata por la mañana y otra por la tarde: si el humo es negro, seguirán votando; si es blanco, habrá nuevo papa.
Este jueves se repetirá la imagen en la plaza, con miles de personas que esperarán la nueva fumata rezando o charlando con otras personas a los pies de la basílica, que permanece abierta al público. En la web de Onda Regional mantenemos la emisión en directo de Vatican Media, cadena de televisión pública de la Ciudad del Vaticano, para seguir lo que ocurre en el cónclave.
¿Cómo se consigue que no haya dudas sobre si la fumata es blanca o negra? Cuando se trata de fumata negra, las papeletas fallidas se queman con una composición química formada por potasio, antraceno y azufre. En la quema de las papeletas se añaden cartuchos a la combustión desde una estufa paralela a la que quema las papeletas, intensificando el color negro.
Por su parte, la fumata blanca se consigue usando paja humedecida. La humedad retenida por las fibras vegetales consigue la nube blanquecina. Aunque, para evitar cualquier confusión, se añaden productos químicos: cartuchos de clorato de potasio, colofonia y lactosa.