También piden a los ayuntamientos rebajas de impuestos y un cambio total del modelo de seguros agrarios
Consejería de Agricultura y cooperativas agrarias de la Región envían una carta al ministro Luis Planas para que el Gobierno conceda ayudas directas que permitan la supervivencia de las cooperativas de frutas de hueso afectadas por los episodios de granizo del pasado mes de mayo. Hay zonas de Jumilla o Yéchar, en Mula, donde se ha perdido el 80% de la producción y muchos negocios están abocados al cierre.
La consejera Sara Rubira se ha reunido esta mañana con representantes de las cooperativas para analizar el impacto del pedrisco, que ocasionó daños en 35 millones de kilos de fruta, viñedo, olivar o almendro. Las ayudas solicitadas al Ministerio, que serían como máximo de 200.000 euros por beneficiarios, servirían para atender los gastos fijos de los centros de acondicionamiento de las cooperativas, como asegura Santiago Martínez, presidente de la Federación de Cooperativas Agrarias, FECOAM.
Esas ayudas estatales, conocidas como de "mínimis", ya se aprobaron en 2022 para compensar los daños sufridos por las empresas agrícolas afectadas por las heladas de la borrasca Ciril. Pero los agricultores no se quedan ahí, piden a los ayuntamientos rebajas de impuestos y un cambio total del modelo de seguros agrarios. Los actuales no sirven para afrontar los efectos del cambio climático en el campo, según explica Santiago Martínez.
El Gobierno regional se compromete a seguir ayudando a los agricultores. De momento ha habilitado dos líneas de financiación: una para que puedan poner a punto los cultivos dañados por el granizo y otra para los créditos de campaña que ya tuviesen contratados previos a la tormenta. La consejera Sara Rubira cree que es fundamental la agilidad en la tramitación de las ayudas. Las indemnizaciones de los seguros ya han comenzado a pagarse,
