El Consejo Económico y Social advierte de que el aumento del empleo y la recuperación tras la pandemia conviven con rentas bajas, precariedad laboral y una elevada exclusión social
Crece la economía regional pero también lo hacen las tasas de pobreza y de exclusión social. Son algunas de las conclusiones de la memoria sobre la situación socioeconómica y laboral de 2024 elaborada por el Consejo Económico y Social y que ha sido presentada este viernes.
Una inflación controlada, la bajada de los tipos de interés, la rebaja de los costes energéticos y el aumento de la tasa se empleo han sido algunos de los factores que han favorecido un crecimiento por encima del 3.2% de la economía murciana en 2024. Un dato que consolida el proceso de recuperación tras la pandemia. Pero persisten los desequilibrios. Rentas por debajo de la media y una alta tasa de pobreza ensombrecen los buenos datos económicos. Desde el CES demandan afrontar los numerosos retos que tiene la Región todavía por delante con diálogo y consenso con las organizaciones y agentes sociales, como explica Ramón Avilés, secretario general de CROEM.
La alta tasa de pobreza es la debilidad más destacable en la Región. La alta demanda de empleos considerados de baja cualificación empobrece las rentas y favorece el aumento de las desigualdades. Desde el CES reclaman que se ponga en marcha la Estrategia de Lucha contra la pobreza anunciada en 2024 y recomiendan ampliar la cobertura de las prestaciones sociales.
Aunque la tasa de empleo sube, con un máximo histórico de 680.000 personas ocupadas, la tasa de temporalidad sigue aumentando y la de desempleo de larga duración repunta, con una cifra de 26.100 personas. La estrategia pasa por disminuir la economía sumergida, bajar la siniestralidad laboral, potenciar la formación profesional e impulsar las estabilizaciones de empleo público, como asegura Paqui Sánchez, secretaria general de UGT.