No pudo justificar la procedencia de los animales
La Guardia Civil investiga a un vecino de Molina de Segura después de localizar en su domicilio seis tortugas protegidas o en peligro de extinción, cuya procedencia no pudo justificar.
La actuación se inició tras un aviso ciudadano, cuando el Servicio de Protección de la Naturaleza fue alertado de que un hombre mantenía varias tortugas en el jardín de su vivienda.
Durante la inspección, los agentes intervinieron tres hembras de tortuga mediterránea, un macho y una hembra de tortuga mora, además de una hembra de tortuga rusa. Al no presentar documentación que acreditara su legal procedencia, se le instruyeron diligencias por un presunto delito contra la flora y la fauna.
La tortuga mora cuenta en España y Europa con un grado de protección estricto, considerándose especie en peligro de extinción a nivel nacional y vulnerable internacionalmente. Está protegida por la Directiva de Hábitat de la Unión Europea y su tenencia como mascota es ilegal desde 2015.
Por su parte, la tortuga mediterránea también posee un alto nivel de protección, figurando como especie en peligro de extinción en el Catálogo Español de Especies Amenazadas. Además, está amparada por la normativa europea y por convenios internacionales como CITES y la Convención de Berna, que prohíben la captura de ejemplares salvajes y regulan el comercio de los nacidos en cautividad.
En cuanto a la tortuga rusa, se encuentra incluida en el Apéndice II de CITES, lo que implica que su comercio está regulado y requiere documentación legal que certifique su origen. Aunque no figura como especie amenazada en el catálogo nacional, su regulación permite controlar su tráfico.
Los seis ejemplares fueron finalmente trasladados al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre El Valle para su cuidado.
