Manuel Ruiz, responsable de COAG en Alhama de Murcia, denuncia que no se puede cruzar al otro lado del río Guadalentín por los destrozos causados en un tramo de longitud cercano a los 15 kilómetros
Las intensas lluvias han dejado caminos cortados, fincas completamente anegadas y zonas incomunicadas en el Guadalentín. Los cultivos de brócoli, cebolla y parrales han quedado seriamente dañados en Alhama de Murcia y Totana, las dos zonas de la Región de Murcia en las que más agua cayó.
Desde COAG en Alhama de Murcia denuncian que no se puede cruzar al otro lado del Guadalentín por los destrozos y que hay que dar una vuelta de entre 15 y 20 kilómetros relata Manuel Ruiz, responsable de COAG en Alhama de Murcia.
Los agricultores han estado achicando agua durante la mañana como han podido y adelantan que las pérdidas van a ser cuantiosas y que la tierra tardará en recuperarse, aunque lo que más preocupa son las infraestructuras
El brócoli, la coliflor y la cebolla son los cultivos más anegados, aunque tampoco se han librado los parrales de la zona, donde se produce gran parte de la uva dominga que se comercializa con el exterior.
Sin contar las zonas afectadas, en el resto de territorio regional estas lluvias han caído como agua de mayo, ya que en el interior regional no había precipitaciones cuantiosas desde hace meses.
Además de evitar un riego, han servido para oxigenar la tierra y lavar los cultivos herbarios y leñosos. Se lamenta sin embargo que apenas haya llovido en el Altiplano. Antonio Moreno, secretario de Agricultura de UPA, y José Miguel Marín, presidente de COAG, las califican de muy positivas.
Las dos organizaciones agrarias han lamentado asimismo que no haya llovido en los pantanos de cabecera, lo que seguro que habría paliado la grave situación que atraviesan.