Belen Rodríguez, directora del área de comunicaciones de Consumur, recuerdan que la fianza está estipulada para desperfectos, pero no para recibos pendientes, limpieza o por deterioros habituales
DEBORAH TOLEDO. Murcia
Miles son los universitarios que año tras año alquilan pisos de estudiantes. Y aunque la demanda es alta, las buenas opciones a veces son pocas. Sin embargo, debido a la necesidad de tener que residir en la ciudad, muchos deben conformarse con alquilar la alternativa menos mala.
Cuando se alquila un piso de estudiantes, no solo es importante fijarse en que la ubicación sea la mejor o el precio, puesto que a veces lo barato resulta caro. A la hora de alquilar, lo mejor es asesorarse bien, y fijarse en el contrato viendo las cláusulas, las condiciones en las que se encuentra el inmueble, y nunca alquilar sin ver presencialmente el lugar cuenta Belen Rodríguez, directora del área de comunicaciones de Consumur.
Los contratos de alquiler, son de temporada, que usualmente van de septiembre a junio y debido a esa condición están un poco más descubiertos, al no estar incluidos en la ley de arrendamientos urbanos, por esta razón los estudiantes tienen que tomar precauciones para no ser víctimas de estafas, como la que sufrió Carmen, quien no pudo recibir el dinero pactado por la fianza.
Desde Consumur recuerdan que la fianza está estipulada para desperfectos, pero no para recibos pendientes, limpieza o por deterioros relacionados con el uso habitual de la vivienda. Por tanto, los inquilinos no deben hacerse cargo de esos gastos y deben reclamar como consumidores.
