Este ejemplar, tras ser recuperado tras ser atendida en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre El Valle, ha sido devuelto al mar en Águilas
REDACCIÓN
Los especialistas del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre El Valle han conseguido recuperar y devolver a su medio natural a un ejemplar de tortuga boba (Caretta caretta) que fue localizada con signos de estrangulamiento y otras lesiones hace dos semanas en Mazarrón.
El animal, en concreto, se encontraba flotando en el mar enredado en una estructura flotante compuesta de cuerdas y botellas de plástico y fue recogida por un piragüista y efectivos de la Cruz Roja del Mar. Este lunes ha sido devuelta al mar en Águilas.
Se trata de una hembra adulta de cerca de 60 kilos de peso que ingresó en el centro con signos de estrangulamiento leves en la base de la aleta delantera derecha, así como una pequeña lesión en ese mismo lado de su pico. Este ejemplar de tortuga boba, especie que está catalogada como vulnerable, había perdido además la visión de su ojo izquierdo.
En lo que va de año han ingresado en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre un total de cinco tortugas vivas, de las que una fue liberada el pasado mes de febrero en Bolnuevo, otra no pudo ser recuperada y otras dos permanecen ingresadas para recibir tratamiento. La causa de ingreso de tres de estos ejemplares fue el enmallamiento con plásticos y basuras flotantes a la deriva, mientras que las otras dos llegaron como consecuencia de traumatismos y heridas producidas posiblemente por colisiones con embarcaciones.
El consejero de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente en funciones, Javier Celdrán, asistió a la liberación de este ejemplar y destacó que la eliminación de los plásticos y otros residuos de los mares y océanos “es uno de los retos ambientales a los que se enfrentan la sociedad en la actualidad.
Los expertos hacen hincapié en que si observan a una tortuga en mal estado o un intento de anidamiento, lo más importante es no molestar al animal y llamar al 112.