El alcalde de Lorquí, Joaquín Hernández, miembro de la Junta de Gobierno de la FEMP, dice que la solución final "tendrá que venir de un nuevo impuesto"
PACO MARTÍNEZ. Murcia
La Federación de Municipios de España ha aprobado hoy una declaración institucional en la que pone de manifiesto el enorme problema que supone para las finanzas de todos los ayuntamientos del país la sentencia del Constitucional que ha anulado el impuesto de plusvalías. El alcalde de Lorquí, Joaquín Hernández, que es miembro de la Junta de Gobierno de la Federación, dice que "son conscientes de que el impuesto era injusto, pero insiste en que el Estado o la Comunidad Autónoma tiene que compensar a los ayuntamientos por esta pérdida de ingresos que pone en peligro la financiación de servicios básicos".
Hernández explica que "la solución final tendrá que venir de un nuevo impuesto, pero para eso va a hacer falta tiempo". Un tiempo que los municipios no tienen, porque llevan meses acumulando gasto extraordinario por culpa de la pandemia y están justo en este momento definiendo sus presupuestos para el año que viene. Así que, entienden que la respuesta inmediata debe pasar por una compensación del Estado.
Dice Hernández que "nadie entra a criticar el fondo de la cuestión, porque a nadie ha sorprendido la decisión del Constitucional. Todo el mundo tenía bastante claro que el impuesto sobre plusvalías, tal y como se calculaba, era injusto". Las arcas municipales se enfrentan ahora a un problema muy grave. El impuesto sobre plusvalías es la segunda fuente de ingresos, sólo por detrás del IBI. "La cuestión es que sin ese dinero, no hay capacidad para asumir gastos que son imprescindibles en educación o servicios sociales", según el regidor.
