Los inspectores sólo detectaron irregularidades de menor importancia, mientras que los testimonios recogidos entre los propios residentes defienden la buena atención que siempre recibieron
REDACCIÓN. Murcia
La Fiscalía Superior de la Región de Murcia ha decidido archivar las diligencias abiertas tras las declaraciones de varios trabajadores en las que denunciaban las malas condiciones en las que se encontraban los usuarios de varias residencias de mayores de la región.
La Fiscalía abrió diligencias de investigación y tomó declaración a varios empleados del Servicio Murciano de Salud, que volvieron a relatar situaciones de aparente desatención a algunos de los ancianos. Los inspectores enviados por la Fiscalía a estas residencias sólo detectaron irregularidades de menor importancia, mientras que los testimonios recogidos entre los propios residentes defienden la buena atención que siempre recibieron.
A la vista de toda esta información, la Fiscalía considera que no se ha acreditado situación de desamparo, ni abandono o maltrato a los residentes, por lo que ordena el archivo de la causa. Esto no agota la vía judicial para la investigación de lo ocurrido en las residencias de mayores. Sigue viva la querella presentada por un grupo de familiares de residentes fallecidos en la residencia de CASER en Santo Ángel.
El procedimiento está a la espera de que la Audiencia Provincial dicte una resolución aclarando cuál es el juzgado competente. Previsiblemente la instrucción recaerá en el número seis, que ya en su momento dictó una resolución en la que admitía la existencia de indicios de delito y se mostraba partidario a la apertura de un procedimiento para investigar los hechos denunciados.
