La asociación Adaner atiende en la Región de Murcia más del doble de consultas habituales de anorexia y bulimia, que incrementan las consultas en los servicios de salud mental
ANA R. GÓMEZ. Murcia
Los trastornos relacionados con la alimentación han duplicado durante la pandemia el número de afectados. La asociación ADANER de Murcia ha pasado de dos o tres casos semanales a recibir peticiones de ayuda en ocasiones de ocho personas afectadas por anorexia, bulimia o ambas.
Es uno de los daños colaterales de la COVID-19 y del obligado confinamiento durante tantos meses. Las consecuencias sobre la salud mental están siendo cada vez más evidentes, y uno de sus derivados es el trastorno en la alimentación, según relata Emilia Hernández, presidenta de la asociación ADANER:
Un articulo de investigación que publica la revista PEDIATRICS sobre un hospital de Michigan, en Estados Unidos, muestra cómo los adolescentes con desorden alimentario han sufrido especialmente el aislamiento social, el cierre de los centros escolares, la ausencia de ejercicio físico y de control sobre el tiempo.
En el caso de nuestra región el combate de la pandemia ha supuesto, nos dice Emilia Hernández, que no sólo los jóvenes se hayan visto afectados, también adultos que nunca habían padecido anorexia o bulimia:
Lo que además se constata, tanto en la investigación clínica como en la experiencia directa, es que los trastornos alimentarios precisan de atención presencial. En Murcia ha estado cerrada varios meses la unidad especializada del hospital Reina Sofía, y ha resultado evidente lo imposible que es suplir el servicio especializado mediante citas a distancia.