Así describe la situación la Asociación Murciana de Medicina Familiar y Comunitaria.
ASR. Murcia.
El servicio de Atención Primaria está colapsado por la pandemia y la atención que requieren los enfermos covid-19, su seguimiento y rastreo. Los médicos tienen que reorganizarse para atender también a los crónicos que más lo necesitan y aquellos profesionales que causan baja por contagio no son sustituidos, con lo que la presión aumenta. Así describe la situación en Atención Primaria el doctor Jesús Abenza, vicepresidente y portavoz de la Asociación Murciana de Medicina Familiar y Comunitaria.
Abenza llega a hablar de ‘medicina de guerra’ para referirse a la situación: atención y rastreo a los enfermos covid-19, a lo que se suma, la presencia de enfermos agudos, es decir, personas con alguna enfermedad que surge de repente. Y, por supuesto, los enfermos crónicos. Hace falta priorizar a quién se atiende.
Y entre crónicos y agudos tienen preferencia para los médicos de familia los convalenciantes de cirugía o de sucesos cardiovasculares, además de otras patologías mal controladas, como la diabetes.
No hay información sobre cuántos profesionales de la medicina hay contagiados de covid-19 en la Región. Lo que sí se sabe con certeza es que cuando caen no son sustituidos.
Por eso, desde la Asociación de Medicina Familiar recuerdan que la vacuna aún no es la solución. Hay que seguir con las medidas de protección individual.