José Antonio Marín Banegas, que regenta el lavadero 'Cieza', afirma que ya son casi ocho días sin apenas clientes, aunque espera que todo vuelva a la normalidad en cuanto pase la borrasca Celia.
CLAUDIO CABALLERO. Cieza
Los dueños de los lavaderos de coches esperan recuperar el negocio que han perdido durante los últimos días por culpa del temporal de barro y calima. Temen una avalancha de clientes en cuanto concluya el episodio.
José Antonio Marín Banegas, que regenta el lavadero 'Cieza', afirma que ya son casi ocho días sin apenas clientes, aunque espera que todo vuelva a la normalidad en cuanto pase la borrasca Celia.
Marín advierte que estos lavados deben de realizarse de manera especial para que el barro acumulado no raye el vehículo.