Una empleada inducía a los clientes a pagar los tratamientos mediante Bizum a números de teléfono o cuentas bancarias que no pertenecían al establecimiento
La Policía Nacional ha detenido a tres personas como presuntas autoras de los delitos de apropiación indebida, estafa, usurpación de identidad y falsedad documental, tras ser consideradas responsables de lucrarse de forma ilícita al desviar dinero de los pagos realizados por los pacientes en una clínica dental situada en Murcia, donde una de ellas trabajaba.
Hasta el momento, los agentes han localizado a 18 clientes que reconocieron ser víctimas de este modus operandi, pero no descarta que pudieran surgir nuevas víctimas.
Además de la trabajadora, los agentes de la Policía Nacional responsables de la investigación han detenido a dos personas más implicadas en estos hechos, imputando a los detenidos los presuntos delitos de apropiación indebida, estafa, usurpación de identidad y falsedad documental.
La denuncia presentada en dependencias policiales por parte del responsable de una clínica dental ubicada en Murcia puso en conocimiento de los agentes que estaban siendo objeto de algún tipo de estafa, ya que el dinero que sus clientes manifestaban haber pagado a través de Bizum o transferencias bancarias por los tratamientos recibidos en la clínica nunca llegaba a entrar en la cuenta bancaria de la empresa.
Esto motivó el inicio de una investigación para el esclarecimiento de los hechos, que condujo a los agentes hasta una trabajadora de la propia clínica dental quien, aprovechándose de la relación de confianza con los clientes, les inducía a realizar los pagos de los tratamientos recibidos mediante Bizum a números de teléfono o cuentas bancarias, haciéndoles creer que pertenecían a la clínica, cuando en realidad eran de otras personas que, una vez recibido el dinero, se lo enviaban a una cuenta bancaria donde figuraba como titular la trabajadora.
La detenida habría llegado incluso a formalizar préstamos para que los pacientes pudieran recibir financiación y realizar los tratamientos médicos indicados, préstamos que realizaba suplantando la identidad de terceras personas, apoderándose de las cantidades económicas autorizadas por las entidades bancarias.