La alcaldesa de Cartagena pide información a los ministerios implicados y a la Delegación del Gobierno
La alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, ha remitido cartas a la Delegación del Gobierno en la Región de Murcia y a los ministerios implicados en las que muestra su oposición a la instalación de un Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) en el antiguo hospital Naval.
Arroyo ha recordado que Cartagena ya alberga un Centro de Atención Temporal de Inmigrantes (CATE), y que ese “ejemplo de responsabilidad de los cartageneros” no puede tener como resultado “la concentración en la ciudad de más instalaciones” de esas características para atender “obligaciones que son responsabilidad nacional y europea”.
En su misiva, Arroyo ha solicitado también información sobre el proyecto, pues en las últimas semanas ha visitado la ciudad personal procedente del ministerio de Trabajo, Seguridad Social y Migraciones a instalaciones del Ministerio de Defensa, con el supuesto objetivo de localizar establecimientos susceptibles de albergar un CETI.
“Esas informaciones han aparecido publicadas ya en la prensa local y se producen justo después de un incidente ocurrido por la gestión deficiente del CATE”, ha señalado la alcaldesa.
Arroyo recuerda en su carta al Delegado del Gobierno, Francisco Jiménez, que el CATE está en pleno proceso de cambio de ubicación, como consecuencia del “conflicto político y el rechazo social” derivado de la “decisión unilateral y no consultada de instalarlo dentro de la bahía de Cartagena, en un lugar incompatible con los usos que la ciudad quiere para esa zona del puerto”.
“Esas decisiones se adoptaron de espaldas a la ciudad y sin contar con sus instituciones”, ha indicado Arroyo, para quien “eliminar a Cartagena de la toma de decisiones para Cartagena fue la causa del fracaso que ha obligado a gastar más dinero público para corregir el error”.
En el texto, la regidora agradece al Ministerio de Defensa la generosidad de la Armada, que ha colaborado en la solución ofreciendo terrenos de su propiedad para la ubicación definitiva del CATE, que ha resultado la solución más rápida y menos costosa para el Estado.
La alcaldesa ha defendido la “obligación de todos” en contribuir a mejorar los medios para la atención humanitaria y para el trabajo que la Policía Nacional desarrolla en su obligación de controlar las fronteras y en aplicación de las leyes.
No obstante, ha recalcado que “ese esfuerzo debe ser solidario”. “La generosidad de Cartagena no puede pagarse con más instalaciones de estas características”, ha aseverado.