Según María José Díaz, portavoz de la Unión Progresista de Inspectores de Trabajo, dice que estos días aumentan el número de inspecciones pero no pueden abandonar el resto de sus obligaciones y al final, no dan a basto
El fuerte calor que estamos soportando estos días, nos trae un trágico balance que es ya un clásico del verano. El de los accidentes de trabajo provocados por las altas temperaturas. Sólo en la jornada de ayer se produjeron hasta cinco intervenciones del 112 y la inspección de trabajo está investigando tres de ellos.
Las estadísticas reflejan cinco sucesos provocados por el calor en el ámbito laboral en la jornada de ayer, uno de los cuales acabó con una trabajadora hospitalizada, pero según CCOO podrían ser algunos más que no han quedado reflejados en las estadísticas. Además, señalan que solo en la última semana se han producido al menos 15 consultas de trabajadores que estaban realizando su labor en condiciones especialmente calurosas. Desde los sindicatos, recuerdan que los trabajadores tienen dos formas de denunciar estas situaciones.
La responsabilidad de la salud de los empleados corresponde al empresario y son las empresas las que tienen que elaborar planes de prevención ante episodios de calor extremo que pueden incluir la prohibición de trabajar, pero estos planes no siempre se cumplen. Solo en la jornada de ayer, la inspección de trabajo tuvo que abrir tres investigaciones y el verano la pasado se alcanzaron las 25 casos. María José Díaz, portavoz de la unión progresista de inspectores de trabajo reconoce que en estos días aumentan el número de inspecciones, pero no pueden abandonar el resto de sus obligaciones y al final, no dan a basto.
Desde los sindicatos recuerdan que al margen de la legislación laboral, es importante actuar con sentido común para evitar tragedias porque el calor no sólo trae consigo el peligro de sufrir un golpe térmico, sino que también puede producir caídas o faltas de atención provocadas por el cansancio con desenlaces fatales.