La investigación señala que la mujer falleció en el parking, donde fue localizada horas más tarde y trasladada hasta su habitación, presuntamente, por varios trabajadores
PATRICIA JIMÉNEZ | REDACCIÓN. Yecla/Murcia
El gerente de la residencia San Isidro de Yecla, donde Guardia Civil ha investigado a doce empleados por el fallecimiento de una usuaria en septiembre del pasado año, ha dicho que hasta el día de hoy y ante la empresa, los trabajadores no han cambiado su versión de los hechos. José Miguel Marín ha asegurado que cuando la Justicia hable, actuarán en consecuencia. De momento, los empleados del turno en el que falleció Blasa, continúan trabajando.
Marín ha explicado que tanto los empleados como la dirección del centro mantienen que la mujer falleció en su habitación y no en la zona del aparcamiento, como advirtió una nota anónima que inició la investigación de la Benemérita.
Por este motivo, Marín dice que han recibido con sorpresa que la investigación atribuya presunta autoría de homicidio por imprudencia a diez empleados y de encubrimiento a otros dos. Asegura, no obstante, que cuando la Justicia hablé será "inflexible".
Según la investigación de la Guardia Civil, los empleados trasladaron el cadáver de la mujer hasta su habitación y lo asearon con la presunta intención de ocultar a la familia que la mujer murió tras permanecer horas desaparecida.
Por su parte, la consejera de Política Social, Conchita Ruiz, también se ha referido a este caso aunque no ha querido profundizar al estar judicializado. Sí ha confirmado que su departamento tuvo conocimiento del hecho hace ahora un año y que desde entonces han llevado a cabo una investigación cuyas conclusiones han sido puestas a disposición de la justicia.
